Cuartos de baño
Sácale el máximo partido a tu baño aunque sea pequeño. Te ayudamos con estos 16 consejos a aprovechar el espacio de tu baño y a que parezca más grande. No podemos prescindir de los elementos imperativos del baño pero por otro lado siempre queremos que se vea más amplio.
Revestimientos: claros y pequeños
Blancos, beiges, crudos… Son las mejores tonalidades para baños pequeños. Estos reflejan la luz y amplían el espacio. Úsalos para revestir las paredes y el suelo. Y elige baldosas pequeñas (las de gran formato empequeñecen). Si quieres ganar calidez, opta por un suelo de parquet con tratamiento anti humedad.
Muebles en proporción al espacio
Lo ideal es escoger sanitarios compactos (miden hasta 6 cm menos de fondo) y muebles pequeños pero bien equipados. Lo mejor es proyectarlos a medida para aprovechar hasta el último centímetro y no crear rincones muertos.
Mantener el suelo despejado
Escoge elementos suspendidos como sanitarios y muebles. Un suelo despejado potencia la amplitud y lo más importante: facilita la limpieza.
Distribuir el baño con lógica
Adosa todos los elementos del baño a las paredes para dejar libre el espacio central y ganar en sensación de amplitud. No coloques el inodoro tras la puerta de entrada, es muy incómodo cuando se usa.
Dividir con separaciones de cristal
Las separaciones de cristal no restan luz ni crean divisiones. Recurre a mamparas de cristal, fijas o practicables, para separar la ducha y evitar salpicaduras. Puedes ganar intimidad con una franja de cristal al ácido.
El espejo, grande y sin marco
Resultará más ligero y multiplicará la sensación de espacio. Elige un modelo retroiluminado (te ahorrarás los apliques) y con armario (solo 10 centímetros de profundidad son muy útiles).
Evitar la bañera y el bidé
En el espacio de la bañera podrás tener una ducha más amplia, un radiador toallero y un pequeño asiento. Y el rincón del bidé podrás aprovecharlo para ganar almacenaje.
Reflejar la luz de la ventana
Si tienes una ventana por la que entra luz natural, coloca la zona del lavamanos de espaldas a la ventana. Además de evitar que el sol te deslumbre, conseguirás que el espejo refleje la luz y la proyecte por todo el baño.
Instala lavamanos exentos
Al apoyarse en la encimera, no restan espacio al mueble bajo lavabo. Si el primer cajón tiene un hueco para el sifón, podrás aprovechar los laterales y la zona delantera del cajón.
Proyectar el almacenaje en vertical
Aprovecha la altura del baño con armarios que lleguen al techo. Un buen rincón para ubicar una zona de almacenaje es la pared del sanitario. Proyéctalo de poco fondo, para que no pese visualmente y colócalo a partir de donde nadie pueda darse un golpe.
Instala un radiador toallero
Los hay de tamaño mini (apenas una barra horizontal) y ofrecen calor y un soporte para dejar las toallas y mantenerlas secas y calientes.
Ventanas que ocupan menos
Escoge ventanas correderas u oscilobatientes, son los dos sistemas que ocupan menos al abrirse.
Planificar hornacinas para guardar
En la ducha, sobre el inodoro… Aprovecha los falsos muros (de sanitarios empotrados, de griferías de pared) para crear huecos u hornacinas en las que apoyar cosméticos o pequeños objetos decorativos.
Puertas y cajones sin tiradores
El objetivo es que no sobresalgan de los muebles, no ocupen espacio y evites los golpes. Los sistemas de uñero y los de presión (se abren al presionar con la mano) son ideales.
Mamparas para ganar espacio
O para no perderlo. Si frente a la ducha no tienes espacio para abrir la puerta de la mampara, elígela de puerta corredera o sin puerta.
Griferías de diseño minimalista
Aunque sean grandes, si tienen una estética depurada ocuparán menos visualmente. Para el lavamanos, escoge un grifo monomando (si tienes opción de encastrarlo en la pared ganarás unos 10 centímetros de encimera). Y si quieres un rociador de gran tamaño para la ducha, escógelo también de encastre. Quedará enrasado con el techo y apenas se verá.