El baño, los baños; no precisamente uno de los lugares secundarios de la casa. Es un rincón íntimo, en el que debes encontrarte a gusto.Por ello es uno de los lugares donde más se aprecia la reforma.
En algunas ocasiones se realiza la reforma del baño por razones de estética o comodidad, y hay otras veces en las que se inician por otras causas. Por ejemplo, si las tuberías del baño son antiguas y te han dado ya algún susto que otro (escapes, humedades), no lo dudes, el problema irá a más, ha llegado el momento de cambiar la fontanería del baño. Las tuberías antiguas eran de plomo, material en desuso por temas medioambientales y su menor resistencia, y cuando su mal estado aflora son un continuo dolor de cabeza. Y si hay que tocar paredes es un buen momento para abordar la reforma del baño.
ELEMENTOS HABITUALES EN EL BAÑO
El primer elemento a tener en cuenta al realizar la reforma del baño es la puerta. Da entrada a la estancia, requiere un espacio propio para su manejo, y definirá el ángulo que permite ver ciertos elementos y ocultar otros desde el exterior (por ejemplo, es mas agradable a la vista desde el exterior un mueble que un inodoro). Además, la colocación del resto de elementos del baño deberán tener en cuenta a la puerta y el espacio necesario para abrirla y cerrarla, para que nuestro uso del baño no se convierta en un engorro.
Además deberemos tener en cuenta ventanas y las asimetrias y salientes en la estructura de la estancia y ver como pueden afectar a la colocación de los diferentes elementos (mamparas, muebles, etc…)
Inodoro y bidé
Es importante situar el inodoro lo más próximo posible a la bajante de aguas, puesto que nos ahorrará muchos disgustos evitar que nuestro inodoro desagüe mal. Dado que el desagüe del inodoro debe tener una pendiente mínima para alcanzar la bajante y acceder a ella lo más directamente posible, se deben evitar los codos o cambios de dirección en su canalización de desagüe. Siempre se puede optar por subir el nivel del suelo para colocar el indoro, pero es una opción que comunmente va en detrimento de la estética.
El bidé es un elemento del que puede decidirse precindir en caso de falta de espacio. Depende de cuanto uso pienses darle puede ser una decisión acertada. Hay que tener en cuenta que no sólo ocupa el lugar donde está situado, sino que requiere de un espacio alrededor para su uso.
Bañera y ducha
La bañera es un elemento cada vez más en desuso. A no ser que seas un gran fan del baño relajante o que tengas niños en casa, o si dispones de poco espacio en tu baño, lo más habitual es optar por el plato de ducha, lo cual además suele suponer un ahorro sustancial en consumo de agua (aunque eso dependerá de los hábitos de consumo de agua en la higiene).
En cuanto a la colocación del plato de ducha, debe tenerse en cuenta en primer lugar que debe tener al menos una superficie libre de medio metro para poder maniobrar cuando entremos o salgamos de la ducha. Lo normal, por aprovechamiento de espacios, es situarlo usando dos o tres paredes.El plato de ducha puede ser tanto adquirido como construido de obra. Este último caso es mucho más decorativo y acogedor, pero el coste aumenta tambien por que requiere unos trabajos de construcción e impermeabilización mayores.
La mampara, puede ser de diversos materiales, como de costumbre más resistentes y decorativos cuanto más caros (en el mundo de las reformas esto no siempre es así, pero este no es el caso). La apertura de las puertas de la mampara puede ser por puertas correderas o practicables, y las puertas pueden estar situadas en un lateral o justo en el vértice de dos laterales. Todo ello debe decidirse en función de la distribución de espacios en nuestro baño.
El lavabo
El lavabo es un elemento que se suele decidir más rápidamente de lo que se debería, sobre en las reformas con bajo presupuesto. Cuando se quiere realizar una reforma barata del baño se suele escoger uno estandar por ahorrar. Y no es mala opción, ya que al fin y al cabo ‘sólo’ sirve para lavarse las manos. Bueno, para lavarse las manos, lavarnos los dientes, peinarnos, afeitarnos, mirarnos al espejo, y sobre todo colocar múltiples aparatos y potingues mientras realizamos todas esas tareas. El lavabo ocupa un espacio, debajo del cual queda un hueco que no se aprovecha. Es el lugar ideal para colocar un mueble de lavabo con sus cajones y estanterias, donde colocar todos esos potingues y aparatos. Cuantas reformas baratas del baño echan de menos ese mueble, que acaba poniéndose luego sobre nuestro reluciente alicatado y ocupando un espacio en la pared cuando teníamos un espacio desaprovechado bajo el lavabo. Por tanto un consejo: cuanto más pequeño sea tu baño más vas a necesitar un lugar para almacenar algunas cosillas, y ¿que mejor que un mueble que no ocupa nuevo espacio?
Otros aspectos
Encima del lavabo irá el espejo, y puede dejarse entre ellos un hueco para una estante que siempre viene bien.
Hay que tener en cuenta también el radiador, que ocupa un espacio muchas veces escaso. Si deseas ‘matar dos pájaros de un tiro’ puedes situar un toallero que haga las funciones de radiador en un espacio alto no usado de la pared, por ejemplo sobre inodoro o bidé, cercano a la ducha. Ello te permitirá dar un nuevo uso al lugar que antes ocupaba el radiador.
Piensa en donde situar interruptores y enchufes, teniendo en cuenta que deberían guardar una distancia a las salidas de agua de aproximadamene un metro, por razones de seguridad.